Tula, ciudad de Quetzalcóatl

Se trata de los Atlantes de Tula, esculturas monumentales que representan a antiguos guerreros toltecas y que se han convertido en un símbolo de identidad para la región y de admiración a nivel nacional. Estas figuras representan a guerreros toltecas ataviados con tocados, pectorales y sandalias, y portando armas como el atlatl (lanzadardos) y cuchillos. Se cree que los atlantes fungían como columnas que sostenían el techo de un templo situado en la cima de la pirámide, simbolizando el soporte del cielo por parte de estos guerreros divinos.

El Atlante de Tula no solo es un monumento que representa la civilización tolteca, sino que también es un símbolo de la rica herencia cultural de México. Su significado trasciende el tiempo y el espacio, convirtiéndose en un referente para la identidad nacional. A medida que el estudio de este monumento avanza, se hace evidente que su interpretación seguirá evolucionando, reflejando los cambios en la percepción de la historia y la cultura en México. La iconografía de los atlantes y su simbolismo ha sido objeto de múltiples interpretaciones a lo largo de los años, lo que refleja la riqueza de la historia tolteca y su capacidad de adaptación y transformación. A través de una comprensión más profunda de su significado, se puede apreciar cómo el Atlante de Tula continúa siendo un símbolo poderoso de la identidad cultural mexicana, resonando en la memoria colectiva y en el arte contemporáneo.

Coatepantli o Muro de las Serpientes

Si deseas profundizar más en el tema, te invitamos a visitar nuestro sitio web conceptosdelahistoria.com, donde encontrarás más información sobre los Atlantes de Tula y otras culturas antiguas. El descubrimiento de los Atlantes de Tula en el siglo XIX marcó un hito en el estudio de la civilización tolteca. Los arqueólogos se sorprendieron al encontrar estas enormes figuras de piedra, que revelaron la complejidad y sofisticación de la cultura tolteca. Desde entonces, los Atlantes han sido objeto de numerosos estudios e investigaciones, y su descubrimiento ha permitido a los historiadores y arqueólogos entender mejor la influencia de los toltecas en la Mesoamérica precolombina. Los Atlantes de Tula son un conjunto de esculturas monumentales que representan una de las contribuciones artísticas más impresionantes de los toltecas.

La técnica de construcción de los Atlantes

Para verlas hay que tomar la carretera y, una vez en el sitio arqueológico, dirigirse hacia la Pirámide B. Luego, mirar en dirección a un templo llamado “Estrella de la mañana”, el cual fue dedicado a Quetzalcóatl, una deidad que para los toltecas representaba la dualidad de la existencia. Los Atlantes toltecas ‍son una de las manifestaciones más emblemáticas de ‌la cultura tolteca, destacando por su imponente presencia en diferentes sitios arqueológicos de Mesoamérica. Estas esculturas colosales representan⁢ seres humanos con cuerpos robustos y rostros impasibles, sosteniendo sobre sus hombros estructuras arquitectónicas ⁣o altares ceremoniales. Su significado es aún objeto de debate entre los especialistas, pero se cree que cumplían diversas funciones dentro de la cosmogonía tolteca.

Y en eso llegamos a la caseta para salir del lugar, la cual se encontraba muy lejos de la caseta por la cual entramos. No teníamos ni idea de como regresar al centro de Tula, por suerte, había un encargado en la salida y nos dijo por donde había que caminar para llegar al centro. La caminata fue agradable ya que había muchas mariposas, pero siempre había que cuidar que no nos saliera algún animalito no muy grato en el suelo (como una serpiente, por ejemplo). En la explicación nos cuenta que hay mucha similitud entre este y el gran juego de Chichen Itza en Yucatan, algo que no podemos corroborar ya que aun no hemos estado allá. Pero después de siglos, por fin quedaban a la vista de nosotros, el pueblo común y corriente.

  • Sin embargo, las pugnas entre los distintos sectores y la entrada de nuevos grupos étnicos, como los mexicas, provocaron su inestabilidad; esto coincide con la destrucción de este centro ceremonial y su abandono.
  • La Revolución Mexicana impulsó un renacer del nacionalismo que buscaba reivindicar las raíces indígenas del país.
  • La descripción de los relieves pétreos parece indicar que se trata de guerreros ya que portan escudos, cascos y armamento como el atlatl, una suerte de lanzadardos, que podría ser una influencia de la cultura de Teotihuacán.
  • Para visitar la zona, no olvide llevar un sombrero y bloqueador solar, pues los rayos del sol son fuertes y no hay mucha sombra.

Después de cruzar Tepotzotlán hay que desviar a la carretera 87 que conducirá hasta Tula. Por otro lado, se puede tomar un autobús desde la Central del Norte con destino a Tula. La llegada es al centro de la ciudad; de ahí se requieren eotravel de otros 15 minutos de taxi para llegar.

Investigaciones como las realizadas por Eduardo Matos Moctezuma y David Carrasco han aportado valiosos conocimientos sobre la cosmovisión tolteca y su relación con otras culturas mesoamericanas. Estos estudios han puesto de manifiesto que el Atlante no solo es un elemento artístico, sino que también es un testimonio de la complejidad social y religiosa de la civilización tolteca. Además, la figura del guerrero en el arte tolteca puede ser vista en el contexto de la influencia de la cultura zapoteca y mixteca. Estas culturas también representaban guerreros con vestimenta elaborada y armamento, aunque su simbolismo y función en la sociedad variaban. La dualidad entre lo bélico y lo espiritual es un tema recurrente en Mesoamérica, y el Atlante de Tula se convierte en un puente que conecta estas diversas expresiones culturales, evidenciando las interacciones y relaciones entre las diferentes civilizaciones de la región. El descubrimiento del Atlante de Tula se remonta a las excavaciones realizadas en el siglo XIX, cuando exploradores y arqueólogos comenzaron a investigar las ruinas de la antigua ciudad tolteca.

La estructura culmina con unas rodilleras, y con unos cacles o sandalias, con representaciones de serpientes emplumadas en los costados. Los Atlantes de Tula son esculturas ensambladas con 4 fustes, pertenecientes al arte de la cultura tolteca, las cuales representan guerreros con coronas de plumas, que portan armas como cuchillos, flechas y lanza dardos, fueron descubiertos por el arqueólogo Jorge Acosta. Así que visitar este zona arqueológica tolteca te dejará encantado, además de los Atlantes, puedes ver la cancha del juego de pelota y un museo de sitio donde se descubre toda la historia del lugar, del yacimiento y un sinfín de datos sobre los impresionantes Atlantes de Tula. Se considera que son representaciones de Quetzalcóatl como la Estrella de la Mañana, que como sabemos no es una estrella sino más bien el planeta Venus, que poco antes del amanecer fulgura como si fuera una estrellas. Quienes los conocen de primera mano dicen que es como si estas magníficas esculturas hubieran sido edificadas para custodiar eternamente la que fuera la gran capital de la civilización tolteca.